Te invitamos a ser parte de una experiencia grupal muy profunda, renovadora, transformadora y especial.
ACTIVIDADES
Armonizaciones. Meditación. Constelaciones Familiares. Ejercicios Sistémicos. Dinámicas sistémicas, reflexión, que equilibren y sanen nuestro cuerpo, mente, emociones y nos lleven a un estado profundo de introspección para hacer contacto con nuestro interior... para ordenar, comprender y sanar nuestra propia historia.
ACTIVIDADES INTEGRADAS CON LA PARTICIPACIÓN ESPECIAL DE:
* Raúl "Pelusa" Valarin, Guía de Montaña nos propone en esta oportunidad tocar el cielo con las manos en una excursión muy especial sobre el filo de las sierras de Ongamira, aproximadamente a 50 minutos de Capilla del Monte. Subiendo en vehículos 4x4 contemplaremos la majestuosidad de una de las maravillas naturales de la provincia de Córdoba con sus formaciones rocosas y verdes característicos. La propuesta nos lleva a un viaje interior, con el aire mas puro junto a meditaciones, cantos, música y mantras que acompañaran la experiencia, como así también permanecer en un estado de silencio interior para facilitar la conexión en cada uno, consigo mismo. El paisaje brinda esta mística en el que observaremos este fenómeno con los ojos físicos y por el otro, es una invitación a mirar con los ojos del alma, aquello que solo a través de la percepción podemos lograr y en el alma recordar, ya que como dice la Ciencia Hermenéutica en dos de sus leyes: “lo que es arriba, es abajo” y” lo que es afuera es adentro”. El resto, es un proceso interior, un reconocimiento que en cada uno será singular. Sumado a también el avistaje de Cóndores "Guardianes del lugar" que nos transmiten su libertad y nos llevan a sus alturas con el pensamiento. A este lugar sagrado, nos adentraremos por el camino de Quebrada de Luna, en el corazón de las Sierras Chicas, a 9 kilómetros de la ciudad de Capilla del Monte: es uno de los caminos más hermosos y profundos para iniciar una “peregrinación” al centro de sí mismos que ofrece la zona norte del valle de Punilla. Pareciera que el tiempo allí se detuvo. Es un paraíso terrenal y una naturaleza superadora para los sentidos humanos.
Tierra sagrada de los Comechingones, enmarcada por un fascinante paisaje agreste y salpicado por pequeñas cascadas arroyos, quebradas y campos dibujando un cuadro de ensueño.
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